Sant Climent de Taüll – Del fresco a la realidad virtual

En septiembre de 2018 estuve en Barcelona trabajando en algunos proyectos y presentando mi último libro «Un año en la antigua Roma» y no pude resistir pasear un rato por las salas del MNAC bajo la tenue luz y la paz que desprenden los frescos de numerosos ábsides románicos. Uno en especial lo conozco desde hace muchos años, más de los que puedo recordar, el de la iglesia de Sant Climent de Taüll, en el valle de Boí en el Pirineo ilerdense. Así, armado con mi cámara -una Canon 5Ds- me dispuse a virtualizar en 3D las pinturas como souvenir 3D del viaje -unos toman selfies para recordar, yo hago lo mismo con los modelos virtuales-.

A pesar de que las condiciones de iluminación, como el lógico, no están pensadas para estos menesteres, la ayuda de la fotografía en formato crudo me permitió revelar más adelante lo que las sombras escondían en un total de 45 fotografías que reflejaban las pinturas con todo detalle.

comparacion revelado pinturas taull raw

A partir de ahí procesé el modelo completo del ábside en el software de fotogrametría Photoscan, de más de cuatro millones de polígonos para conseguir que tanto el detalle visual como el geométrico estuvieran presentes en el modelo. Todo ello con buen resultado, en mi opinión, para una captura impromptu. Además, decidí que lo mejor sería aislar tan solo las zonas con pintura original, descartando el resto del modelo para conseguir una visualización más limpia y directa.

pinturas recortadas taull modelo 3D

Finalmente, me pareció razonable crear en Blender una estructura que me permitiera acoplar sobre ella las pinturas originales para que no quedaran «flotando» en el aire y el espectador tuviera un sentido unitario. Sin embargo, como no quería distraer demasiado la vista de lo fundamental, realicé un modelado geométrico y sencillo, al estilo del que ya había hecho anteriormente para el modelo de las bóvedas de la Catedral de Segovia.

Gracias a la mejora de las condiciones de iluminación restringidas mediante el revelado digital, la potente resolución de la cámara empleada y la optimización del modelo para que pueda ser reproducido en cualquier dispositivo, el resultado del souvenir 3D es más que satisfactorio para conservar el recuerdo de las pinturas -e incluso para revisar su microrelieve gracias al inspector de modelos de Sketchfab. Aquí está precisamente el modelo definitivo que puede ser visualizado de forma interactiva o en realidad virtual y aumentada. Espero que os guste.

Aprovecho para recordaros que hace unos años se llevó a cabo un proyecto de videomapping en la iglesia gracias al que las pinturas pueden volver a su hogar gracias a la proyección mapeada en 3D. Realmente merece la pena ir en persona para ver el resultado, porque es espectacular: pantocrator.cat
2018-10-08T17:47:11+00:00

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